10.10.10

Niña nube (Sonata en estado de jazz)


Yo me pregunto a veces si en la noche

puedes oírme.

Y es que en la noche eterna

mi tristeza es tal

que no llega a verte,

niña nube.

Las gaviotas

olvidaron el vuelo

y aquí nos quedamos,

tú peregrina de la soledad,

yo contrabando de lo que aún pueda

soportar.


Mil nubes y tú,

mujer detrás de todo,

que guardaste un beso para mi

en aquel malogrado aeropuerto

antes de irte al lugar

del que nunca volverías

hasta verme muerto.

Madrid mientras es un año de problemas,

ciudad de pobres corazones.

Tú, niña nube, mujer madura.

Yo, tras la muerte, alcohol y ruina

con las chicas

del Chatanuga.


Una mirada,

un gesto un viernes, niña nube.

Y mi cuerpo se hizo surco

entre tus labios

y me leíste en el silencio

y te compartí en la ebriedad

y nada era ya secreto

y nada alrededor

era aterrador,

como los árboles ahora.


Ahora sigue octubre

y cada mañana es la primera

en el último borde,

dibujado sobre el asfalto

que antes hervía de nuestro amor,

que derretía nuestros cuerpos

y que ahora se esconde

entre la gente

al espanto

del recuerdo vacío,

de tu figura desnuda,

de mi cama deshecha.

Deshecha sin ti,

deshecha de mi.


Pero tú no estarás sola

mientras fumo en los hoteles

y hago cosas

que no se hacen.

Y hablan los papeles de mi

y de la poesía

y de la violencia

y de los traumas,

aquéllos que me alimentan

cada mañana

para poder seguir.

Tú no estarás sola,

te llevaste mi vida,

niña nube,

mujer peligrosa.


Marcharse, continuar.

Mallorca, Ámsterdam.

Deprimirse, emocionar.

Mañana no existe

y donde ya no hay adiós

ya no hay nada.

Ya no hay tú, ya no hay yo.


Quédate conmigo,

niña nube,

un día más,

sólo uno.

Eres tan bonita,

tan delicada.

Sigue las luces

y déjame un domingo más

invitarte a bailar,

follarte suave,

marcarte el compás,

volver a empezar.


Y me pregunto a veces si en la noche,

de niña a mujer,

de nube a luna,

escuchas mi sonata

y te escuece el corazón.

Y te sientes sola

y te asaltan las dudas.

© Pedro Letai

2010

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